lunes, 27 de diciembre de 2010

Por tierras bolivianas

Parecía un milagro poder llegar a Bolivia. Conseguimos cruzar la frontera peruana sin problemas, aunque eso sí, la entrada en Bolivia fue curiosa.. una señal en la que poder sentir la diferencia en la gente.



Mi vejiga iba a explotar, y al divisar unos "baños públicos" corrí a la velocidad de la luz. Contenta que iba fui a entrar, pero el niño que pertrechaba la entrada me vomitó "HAY QUE PAGAR!!!"... y yo que no tenía ni un maldito boliviano (me refiero a la moneda, no a los locales... que había varios) le dije "valeee, pues no meo porque no tengo dinero". Fue en este preciso instante cuando empecé a percibir la diferencia.

Dicen que Bolivia tiene las 3 "B": Bueno, Bonito y Barato. Pero yo he mejorado la frase. Bolivia tiene las 3 "B" y la "H": Bueno, Bonito, Barato y Hostilidad. Madre mía qué gente más borde y seca. Y luego hay personas que osan decirme que yo soy borde. Venga por favor, si en comparación soy un terroncito de azúcar. Aunque hay excepciones claro. Dos de cada 1500 bolivianos no fueron intervenidos quirúgicamente de pequeños, para la extracción de esos músculos faciales que permiten curvar los labios... e incluso pueden llegar a ser amables!

Nuestro primer destino fue la increíble isla del sol, en el Titicaca. Qué maravilla de lugar, era como para hacerte una casita con vistas al lago.. qué remanso de paz y tranquilidad. Eso sí, te sacan entradas a pagar en mitad del camino así sin más. Menos mal que no cobran por respirar! malditos substractores de dinero. Tuvimos el placer de compartir la estancia con Eylín y José, una chilena y un argentino recontrasimpáticos. Cuántas risas y qué agusto estuvimos. Nos vemos en Santiago y Buenos Aires... fue todo un gusto!



Lago Titicaca desde la isla del sol




Caminante no hay camino, se hace camino al andar...


Abbey road boliviano

Después de dejar la hostilidad del lago Titicaca, fuimos rumbo a Sorata. Llevamos más expectativas de lo que encontramos allá, pero nos sirvió para estar de relax y escuchar tormentas brutales nocturnas. Es posible que pueda caer tanta agua del cielo? y dejar a todo el pueblo sin electricidad durante horas? jajajaja.


Familia que no tiene espacio suficiente para tender XD

Llegamos también a la capital. Un vistazo general a la ciudad te deja el color rojo del ladrillo impregnado en las retinas... toda La Paz es así, dando una sensación de monotonía. Salvo en el centro. Una plaza central majica, con alguna calle colonial y edificios bonitos. Visitando la ciudad, el mercado de las brujas, museo de la coca (muy interesante, por cierto) y demás.


Compre su llamita de la suerte en el mercado de las brujas!


Palacio presidencial


Calle Jaén, La Paz

Aprovechamos un día para hacer una excursión en bici por la "carretera de la muerte". 67km cuesta abajo. Increíbles vistas e increíble el camino... qué miedo que tenían que pasar los coches cuando se cruzaban de frente, a ver quién es el valiente que da marcha atrás sin caerse por el precipicio...


El que no pite no pasa no pasaaaa


Equipo actimel survivor!!!

Y las navidades las pasamos por separado. Arcadio se fue 3 días para ascender el Huayna Potosí, y yo en un principio me iba a ir a la selva. Pero se me truncaron los planes y me pudrí en La Paz. Así que me busqué un poquito la vida, viendo cosas que me faltaban y haciendo una excursión al Chacaltaya (5400 m.) y al Valle de la Luna. Muy bonitos!


Chacaltaya de fondo. Sentís el frío?


Valle de la Luna



Y ahorita el gobierno boliviano ha lanzado el "Gasolinazo". El precio de la gasolina se ha duplicado debido al contrabando generado por el bajo costo de los combustibles con relación a otros países. Hay un ligero caos en los medios de transportes. Hay quienes ya se han adaptado a la situación duplicando los precios de los pasajes, y hay quienes han decidido manifestarse. Por suerte hemos conseguido pasajes a Cochabamba, eso sí... más caritos. Ante situaciones extremas, hay que sacar tajadita.

Conseguiremos llegar a Cochabamba? encontraremos piquetes que quemen los buses? quién sabe... sea lo que sea, le seguiremos cantando a la vida!

miércoles, 15 de diciembre de 2010

Despidiéndonos de Perú

Tras muchas horas de bus llegamos por fin a Cuzco. De nuevo me reencontraba con esta ciudad tan bonita. Cuzco enamora a quien la visita, pero para mí... no forma parte del auténtico Perú. Mucho turista, y todo muy centrado en estos. Pero no deja de ser bonita por ello...
Visitamos el Valle Sagrado (Ollantaytambo, Písac y Chinchero), unas ruinas cercanas a Cuzco (Tambo Machay y Pukapukara), la increíble Sacsayhuamán (una fortaleza inca... que a mí me encanta!) y Tipón (otro yacimiento)


Tambo Machay


Sacsayhuamán




Ea!

Y cómo no, fuimos a Machu Picchu. Tuve miedo a que no me fuera a impresionar, a que no me dijera nada (ya que lo vi con Esthersita hace 3 años). Pero estar a las 6:00 de la mañana contemplando esa maravillosa ciudad, con un día increíble y prácticamente para ti sola, le deja a una sin palabras. Machu Picchu te deja sin aliento, sigue igual de increíble que siempre. Te deja absorta mientras lo miras...


Oh yeah!!!



Pero esta vez no fuimos en tren (ese medio de transporte que para pagar el pasaje tienes que prostituirte muchas veces). Decidimos ir hasta Santa Teresa (un pueblo a 7 horas de Cuzco) en bus y colectivo.. y de ahí ir hasta una hidroeléctrica... y caminar durante 2 horas, para llegar a Aguas Calientes (lugar donde duermes para ir al día siguiente a Machu Picchu). Bastante más económico y la caminata de dos horas a la par de la vía del tren.. curiosa. Lo mejor fue la vuelta, que el carro que nos llevó a Cuzco pinchó dos veces la misma rueda...


Saludico especial para nuestra combi!

Y cómo no, para no perder la dinámica que hemos llevado en este viaje un poco, conocimos un par de asociaciones y vimos cómo funcionaban. La asociación Amantaní, que acoge a menores que han sido abandonados por sus padres, o que les han retirado la custodia a sus papasitos. La verdad que me impactó en cierta manera... y me hizo seguir indignándome muchísimo con el ser humano. La otra asociación, Qosqo Maki, ofrece un espacio donde pernoctar a menores que viven en la calle. Una experiencia bonita... También fuimos un día con Pilar, una de las chicas que lleva la asociación Amantaní, al distrito de Ccorca, uno de los más pobres de Cuzco. Allá conocimos un par de "internados", donde de lunes a viernes pueden dormir niñas para poder ir al colegio, ya que viven muy lejos... y tenían que caminar como 5 horas diarias entre ida y vuelta para ir al colegio.

Y la gran sorpresa fue haber encontrado a Marisa, una de las chicas voluntarias que conocimos en Piura. Lo que conllevó dos noches de marcha en Cuzco... ya se sabe, noches de trova, cubatas dobles de ron a precio pamplonica (tocada y hundida!), risas, bailoteos... bien chévere... jajajaja


Versionando alguna cumbia, seguro XD

Y tras 12 días en Cuzco, conseguimos huir (ya que nos había atrapado un poco) hacia Juliaca, una ciudad fea (refea) donde sólo había pollerías y locutorios (verídico). Ciudad de paso para dormir e ir al día siguiente hacia Cambría, y poder ver la isla Suasí. El día empezó a torcerse cuando no encontramos a nadie que nos llevara a la isla (con las ganas que yo tenía). Así que decidimos cambiar de planes. Iríamos hacia la frontera, como a una hora, para ir hacia Bolivia. Así que nos plantamos en la carretera esperando a que pasara un bus... durante 3 horas.


El islote de fondo... Suasí


Esperando al maldito bus

Conseguimos llegar a Titali, el pueblo fronterizo... y aquí empezó el festival del humor: la frontera boliviana no tenía transporte alguno hasta el pueblo más cercano; tampoco teníamos un bus que nos llevara de vuelta a Juliaca. Vamos, estábamos rejodidos en ese maldito pueblo donde no había ni un restaurante. "Muerte y asco en Tilali".

Entre eso y que la gente del pueblo nos estaba vacilando, yo empecé a hiperventilar pensando "Vale Oldazne, piensa dónde puedes conseguir una Kalashnikov y te los cargas a todos"... pero tuve que terminar aceptando que nos quedábamos sí o sí en Tilali. Y quedaba el plato fuerte del día... encontrar un alojamiento! había dos bastante deplorables, siendo el estado del WC decisivo para la elección del lugar de pernoctación: "taza de WC o letrina?".. y ganó la letrina de calle, con eso os digo toditito!!!

No os puedo transmitir lo desastroso del día, la desventura en general, la mala hostia que hice, la mierda de cumpleaños que tuve... pero aun y todo tuve mi regalo de cumpleaños... ver el atardecer en el Titicaca, disfrutando de la tranquilidad y un remanso de paz para los dos solos.

.

Ese Titicaca que me quita el aliento!

No obstante, no hay que olvidar que cuando las cosas van mal... siempre pueden ir a peor. Confiados nos quedamos dormidos aquella noche pensando que al día siguiente estaríamos saltando y cantando en Bolivia. Y cuál fue nuestra sorpresa que en la frontera peruana nos dicen que el sello de salida del país lo ponen en Puno o en Juliaca (lo que implicaba que no podíamos salir de forma legal por esa frontera). Yo ya reía porque era todo como una broma pesada ("qué Kalashnikov ni qué niño muerto... dadme una bomba que reviento este pueblo al toque"). Así que decidí reirme mucho del momento:
-"Consumen algo?" nos preguntaba el policía de la aduana
-"No consumimos nada señor, sólo consumimos felicidad" le contestaba yo al señor aduanero.
Creo que debiera haberle dicho que consumíamos felicidad instantanea hasta que Perú no nos la robaba.

Así que decidimos ponerle al mal tiempo, buena cara. Nos hemos vuelto a Puno. Mañana iremos a ver la isla de los Uros y Taquile (otra vez...), y el viernes partir hacia Copacabana, Bolivia. Sólo si los planetas están alienados, si las fronteras cuñan sellos bonitos en tu pasaporte, si Perú decide que siga siendo un país con especial significado para mí...